por Capitel
fotografía de Luz María Avila
Entrevista realizada el 7 de junio de 2021
ISRAEL CASTRO PAZ ES PSICÓLOGO POR PARTE DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA, CUENTA CON 16 AÑOS DE TRAYECTORIA EN EL ÁMBITO EDUCATIVO EN DOCENCIA Y DIRECCIÓN, TIENE ESTUDIOS DE POSGRADO EN TERAPIA FAMILIAR Y HA REALIZADO TRABAJO CLÍNICO CON PERSONAS EN SITUACIÓN DE VIOLENCIA FAMILIAR Y CONSUMO DE SUSTANCIAS. ACTUALMENTE, HACE LA MAESTRÍA EN ALTA DIRECCIÓN CORPORATIVA POR UNIVERSIDAD HUMANITAS Y SE DESEMPEÑA COMO DIRECTOR DE CAMPUS CANCÚN.
Cuéntenos un poco sobre su formación como psicólogo y su trabajo en esta área.
Un parteaguas en mi formación fue sin duda haber prestado mi servicio social en el Instituto de las Mujeres del Distrito Federal. La capacitación recibida y la experiencia de trabajar de primera mano con personas y grupos que sufren violencia me llevó a continuar mi formación en el área clínica e incursionar en el trabajo con personas inmersas en las adicciones y apoyar a sus familias. Esta experiencia me permitió impulsar de manera interdisciplinaria programas de prevención para jóvenes en el marco de mi labor en diferentes instituciones educativas.
¿Cómo inició su trayectoria en el área educativa y de docencia?, ¿qué herramientas de la psicología complementan su práctica profesional?
El área educativa fue mi opción de especialización en la parte final de la licenciatura, la particular visión de la UAM desde la perspectiva de las humanidades y las ciencias sociales me permitió desarrollar herramientas que hasta la fecha son clave en el ejercicio de mis funciones: la escucha activa, la empatía, el enfoque colaborativo y la definición de objetivos claros de acuerdo con el contexto. Mi primera oportunidad como docente fue a nivel bachillerato, donde la energía de los jóvenes y sus diferentes problemáticas me motivaron a desarrollarme en el área de orientación educativa. Luego incursioné en la docencia universitaria como profesor y coordinador y tuve el privilegio de compartir el gusto por desentrañar los misterios de la complejidad del comportamiento humano.
¿Cómo llegó a colaborar a Universidad Humanitas y qué conocimientos y valores rigen su gestión en campus Cancún?
La invitación para colaborar con Universidad Humanitas llega en un momento coyuntural en mi vida y la de mi familia, los conocimientos y valores desarrollados a lo largo de mi trayectoria encontraron un símil que me hizo identificarme de inmediato con la filosofía Humanitas. Convertir el conocimiento en acciones concretas que contribuyan a mejorar la calidad de vida, formar hábitos que se conviertan en cimientos de desarrollo personal y profesional, crear ambientes y espacios que inviten a la reflexión, el autoanálisis y el trabajo en equipo, son los ejes que guían mi gestión y que promuevo con mi equipo de colaboradores.
¿Cuáles son los mayores retos y satisfacciones que ha tenido como director del campus?
Unir en una visión común al gran talento humano que tengo el privilegio de dirigir fue uno de los primeros grandes retos, y en sí mismo, constituye una gran satisfacción. La unidad del equipo y el respeto por sus cualidades particulares nos han llevado a brindar cada día una mejor atención a las necesidades de nuestra comunidad estudiantil. Juntos enfrentamos no sólo el reto que significó la pandemia, sino también la temporada de huracanes más intensa en los últimos quince años. Gracias a esto, somos más conscientes de nuestra capacidad de ser resilientes ante la adversidad.
Esta edición de Capitel está dedicada a reflexionar sobre la energía, ¿cómo entiende usted este concepto?
La energía se manifiesta de múltiples formas, en el ser humano considero que está inevitablemente ligada al equilibrio. El cuerpo, la mente y la voluntad al estar en armonía brindan una fuente de energía muy poderosa que nos permite transformarnos y a nuestro entorno, incidiendo en quienes nos rodean y contagiando esa energía para poder hacer entre todos más de lo que lograríamos por separado.
¿Quiere agregar algo más?
Invitar a los lectores a visitarnos en campus Cancún donde los recibiremos con los brazos abiertos.
¡Muchas gracias!
[…] la energía de los jóvenes y sus diferentes problemáticas me motivaron a desarrollarme en el área de orientación educativa.