PREVENCIÓN OPORTUNA DE LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES

por Francisco Javier Azar Manzur
imágenes de Vanilla skAI

Aun hoy, las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la principal causa de muerte a nivel mundial, por lo que la prevención resulta crucial para reducir su incidencia y mortalidad. Este texto propone un enfoque integral y preventivo sobre el tema, subrayando la importancia de adoptar hábitos saludables, como hacer ejercicio, mantener una dieta equilibrada y tener un sueño adecuado, para minimizar los riesgos asociados.

Como las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la causa número uno de muerte en el mundo, el objetivo principal de la prevención consiste en disminuir la incidencia, además de reducir la mortalidad. Asimismo, se busca aminorar discapacidades asociadas a dichas enfermedades y mejorar la calidad de vida de las personas. La prevención cardiovascular consiste en llevar a cabo cambios en el estilo de vida para reducir el riesgo de enfermedades. Aunque existen factores de riesgo no modificables, como la carga genética, los antecedentes y la edad, tenemos factores que sí se pueden modificar para ser más saludables.

Evitar el consumo de tabaco. Una persona que fuma tiene cinco veces más posibilidades de enfermar del corazón. Las sustancias químicas del tabaco pueden dañar el corazón y los vasos sanguíneos, disminuir el aprovechamiento del oxígeno y como consecuencia elevar la presión arterial. A pesar de esto, el riesgo asociado al tabaquismo comienza a disminuir desde el primer día que una persona deja de fumar. 

Hacer actividad física. Los beneficios de la actividad física no son solo cardiovasculares. Está comprobado que realizar al menos 150 minutos de ejercicio aeróbico a la semana es fundamental para mantener un buen estado de salud. Recientemente hemos sumado rutinas de fortalecimiento muscular como parte de un plan completo de ejercicio. Mantenerse activo y no ser sedentario siempre será más benéfico para la salud cardiovascular. 

Llevar una dieta saludable. Una dieta sana y balanceada puede ayudar a cuidar la salud del corazón. Existen alimentos que debes evitar o consumir en menores porciones: evitar el exceso de sal o alimentos altos en sodio, azúcares o carbohidratos muy refinados; cuidado con el alcohol, las grasas saturadas y las trans. 

Control de peso. El sobrepeso, sobre todo el que se concentra a nivel abdominal, aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas. El Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 25 es diagnóstico de sobrepeso y se relaciona con alteraciones en los niveles de colesterol, glucosa y presión arterial. Es importante mencionar que un descenso en el peso siempre será saludable y que incluso descensos leves tendrán un mejor impacto en la salud cardiovascular. 

Tener un sueño adecuado. Dormir siete horas al día disminuye el riesgo de obesidad, hipertensión arterial, diabetes y a su vez enfermedades cardiovasculares. Diferentes estrategias pueden ayudar a lograr las horas de sueño, como establecer un horario o dormir y despertar a la misma hora, todos los días. Es importante adecuar el lugar de sueño en un sitio cómodo y apto, que sea oscuro y silencioso. 

Control del estrés. Estar expuesto a escenarios continuos de estrés puede llevar a aumentos en la presión arterial, así como a otros factores de riesgo para enfermedades cardíacas. Las actividades físicas, las técnicas de relajación o de meditación son maneras de canalizar bien el estrés. 

Revisiones periódicas. En general es bien sabido que las mujeres tardan más tiempo en padecer enfermedades cardiovasculares que los hombres, ya que los estrógenos tienen cierto efecto protector sobre la formación de placas de grasa sobre las arterias (ateroesclerosis). Dicho esto, en general los hombres deben empezar a valorar su estado de salud cardiovascular a partir de los 40 años y las mujeres a partir de los 50. Sin embargo, cada individuo tiene que ser visto de forma particular e individual, debido a las cargas genéticas y a las historias familiares. 

Estar expuesto a escenarios continuos de estrés puede llevar a aumentos en la presión arterial, así como a otros factores de riesgo para enfermedades cardíacas.

Vanilla skAI, Porcelain in Heart (Porcelana en el corazón), 2025. Cortesía de la artista.

Vanilla skAI, Artist's Hearts, Tribute to Frida Kahlo (Corazón de una artista, tributo a Frida Kahlo), 2025. Cortesía de la artista.

El control glucémico […] es una determinante fundamental para disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Exámenes de detección temprana. Revisar de manera frecuente la presión arterial, los niveles de glucosa y los niveles de colesterol ayudará a detectar de forma temprana el riesgo de cada persona. Se recomienda empezar a medir la presión arterial a partir de los 18 años. El control glucémico (niveles de azúcar en sangre) es un determinante fundamental para disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Es bien sabido que la diabetes es una enfermedad crónica y que el mal control fomenta una aceleración en la formación de ateroesclerosis. La diabetes implica niveles altos y continuos de glucosa sanguínea, los factores predisponentes para esta enfermedad son el sobrepeso, así como los antecedentes familiares de diabetes. Concretamente en México cerca de un 35% de los mexicanos con diabetes padecen o padecerán enfermedades cardiovasculares en algún momento de la vida. Todo esto nos lleva a la necesidad de disminuir las complicaciones a largo plazo asociadas a la diabetes, haciendo hincapié en el control de los niveles de glucosa pero también en el adecuado control de la presión arterial, de los niveles de colesterol y de los cuidados sobre la función renal. Los niveles altos de colesterol predisponen a los pacientes a enfermedades cardiovasculares y su detección es fundamental para detener el curso de la enfermedad, así como el pronóstico de los pacientes.

La prevención cardiovascular debe ser prioritaria. Como ya dijimos, las enfermedades cardiovasculares son y seguirán siendo la causa número uno de muerte en el mundo, de ahí la necesidad de agotar todas las herramientas a nuestro alcance. La esperanza de vida de los seres humanos ha ido en aumento y esto gracias a los avances en medicina que nos ayudan a prevenir a los pacientes de enfermar gravemente.

Un estilo de vida saludable, evitar la obesidad, no fumar, hacer ejercicio, nos acercará a tener una incidencia menor de enfermedades letales. 

Vanilla skAI, Heart's Bloom (Floración del corazón), 2025. Cortesía de la artista.

Vanilla skAI, What a Heart Can Host (Lo que un corazón puede albergar), 2025. Cortesía de la artista.

Francisco Javier Azar Manzur es médico egresado de la Universidad la Salle y cardiólogo formado en el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”. Desde 2008 ha trabajado como cardiólogo en el Instituto de Cardiología con experiencia en el servicio de urgencias y cuidados coronarios. Desde 2019 es el encargado de la coordinación de posgrado en la dirección de enseñanza en el instituto. Ejerce la medicina privada en el Centro Médico ABC en la Ciudad de México.

Vanilla SkAI es una artista visual cuya vida y obra transcurren en constante movimiento, viajando por el mundo en busca de inspiración. Desde su infancia, cultiva una profunda fascinación por los corazones anatómicos, convirtiéndolos en el eje de su práctica artística. A partir de su trabajo con la inteligencia artificial, explora diversas formas de representarlos, revelando cómo estas imágenes dialogan con los vínculos entre lo tangible y lo simbólico, lo íntimo y lo universal. Instagram @vanilla_skai