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VIDAS EJEMPLARES. HELEN KELLER: ENTRE SOMBRAS, SILENCIOS Y EL CARÁCTER

Retrato de Helen Keller, 1904. 

por Marlene Lelo de Larrea

LA VIDA DE HELEN KELLER DEMUESTRA QUE LOS OBSTÁCULOS SON MÁS BIEN OPORTUNIDADES DE SUPERACIÓN PERSONAL Y QUE, BIEN APROVECHADOS, PUEDEN SER UNA GUÍA HACIA LA GRANDEZA HUMANA.

Hoy en día Helen es conocida como la primer mujer ciega y sorda que se graduó con un título universitario […].

Imagina por un segundo que tuvieras que pensar y relacionarte con el mundo exterior mediante un lenguaje que no fuera el de las imágenes, ni el de los sonidos. Que tu sentido del tacto fuera tan indispensable como el sentir de las vibraciones a tu alrededor. Una vida de silencios y tinieblas, sólo iluminada por la determinación. Ésta fue la vida de Helen Keller.

Un día de 1881 sonó el timbre de una casa en Tuscumbia, Alabama, donde hacía 19 meses había nacido la primogénita. Mientras toda la familia reaccionó al sonido, la pequeña Helen permaneció indiferente. Para su madre, Kate Adams, ésta fue la segunda acción de su hija que la desconcertó, ya que su mirada tampoco seguía los movimientos de su mano. Ante estos síntomas el doctor confirmó aquello que Kate más temía: la fiebre que hacía poco había atacado a Helen -actualmente se cree que pudo haber sido escarlatina o meningitis- había ocasionado que perdiera la vista y el oído.

Helen es conocida como la primer mujer ciega y sorda que se graduó con un título universitario, así como una gran activista a favor de los derechos de las personas con discapacidad y otras causas, mismo que requirió de un gran talante y perseverancia. En 1916, en un discurso contra la entrada de Estados Unidos a la Primera Guerra Mundial, Helen defendió sus ideas al aclarar que la discapacidad nunca fue un impedimento para expresar su opinión y salir adelante. Recordó a quienes la atacaban que “si bien yo no puedo ver la lumbre al final de sus cigarrillos, ellos tampoco pueden ensartar una aguja en la oscuridad”, haciendo referencia tanto a su discapacidad, como a su habilidad.

Sin duda el camino que recorrió no fue fácil, empezando por la frustración que sintió los primeros seis años de su vida al no poderse comunicar claramente, sino sólo con señas y gestos. El Instituto Perkins para Ciegos en Boston sugirió a sus padres que Anne Sullivan fuera su tutora. Desde 1887 Anne consiguió ser mucho más que eso: fue su guía y amiga durante 49 años.

Tras un accidentado comienzo Anne logró que Helen comprendiera el significado de su primera palabra al deletrear en su mano, en lengua de señas, el vocablo “agua” mientras el agua de la fuente mojaba su otra mano. Emocionada y decidida a aprender el significado de más palabras, Helen continuó sus clases. No sólo relacionó el significado de todas las palabras con su seña, sino que más adelante aprendió a leer y escribir en braille, así como a leer braille en francés, alemán, griego y latín. Asimismo, consiguió hablar con el método Tadoma, en el que se colocan las manos en la boca y la garganta de otra persona para sentir las vibraciones de su voz, imitar sus sonidos y enunciar palabras.

Decidida a estudiar una carrera ingresó a la universidad de Radcliffe desafiando a quienes pensaban que las mujeres no debían estudiar y mucho menos aquellas con discapacidad. En esta época escribió La historia de mi vida (1901), memoria de sus primeros 21 años. Posteriormente creó la fundación Helen Keller International para mejorar la calidad de vida de las personas ciegas, recorriendo 39 países para difundir un mensaje de esperanza y optimismo. Formó parte del movimiento sufragista y fue afín a las ideas del socialismo, por lo cual no dejó de ser criticada en la capitalista sociedad estadounidense.

A lo largo de su vida Helen mostró una gran fortaleza y constancia ante la adversidad, no dejó que su discapacidad se antepusiera ante sus deseos de superación y defensa de los más desprotegidos. Sus amistades la ayudaron a perseguir sus sueños, pero su carácter y voluntad le permitieron alcanzar cada uno de ellos.

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Marlene Lelo de Larrea es historiadora y educadora en museos. Actualmente se desempeña como Jefa de Servicios Educativos en el Museo de Arte Moderno y es profesora de diversas asignaturas en el Centro Universitario Incarnate Word. 

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