AURORA REYES Y SU ARTE COMO HERRAMIENTA PARA LA PRESERVACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA

por Sara Mariana Benítez Sierra

En la biografía de Aurora Reyes se conjugan historia, arte y un profundo compromiso social, lo cual se ve reflejado en sus murales de gran calidad técnica y humana, que ayudaron a consolidar la identidad nacional. Conocerla como artista y como figura histórica nos ayuda a entender mejor el México posrevolucionario y la historia de nuestro país.

Aurora Reyes Flores nació el 9 de septiembre de 1908 en Hidalgo del Parral, Chihuahua, y falleció el 26 de abril de 1985 en Ciudad de México. Fue una maestra y artista plástica que expresó su activismo en su obra pictórica.

El apellido Reyes no resulta desconocido: Aurora era nieta del general Bernardo Reyes y sobrina de Alfonso Reyes. Su abuelo se destacó por haber participado en la Segunda Intervención Francesa en México, fue gobernador de Nuevo León y, más tarde, un fiel seguidor del presidente Porfirio Díaz. Su tío Alfonso es reconocido escritor, traductor, diplomático y académico, además de miembro de El Colegio Nacional y de la Academia Mexicana de la Lengua. 

En la revolución, la familia de Aurora fue duramente perseguida tras el asesinato de su abuelo en la Decena Trágica. Su padre, el ingeniero y capitán León Reyes —medio hermano de Alfonso—, tuvo que esconderse en las calles de La Lagunilla. Ella recordaba esos tiempos con temor y angustia, pero también logró identificarse con las clases populares a las que, a pesar de su estirpe porfiriana, dijo pertenecer.

¿Por qué maestra? En 1927, Aurora se convirtió en profesora de Artes Plásticas en educación primaria y se unió a la planta docente de una escuela prevocacional del Instituto Politécnico Nacional. Ejerció la docencia hasta su jubilación en 1964 y promovió la creación de guarderías para hijos e hijas de maestros.

Al igual que grandes figuras como Rivera, Siqueiros y Orozco, Aurora Reyes se identificó con la ideología nacionalista impulsada como propaganda desde el gobierno de Lázaro Cárdenas. Esta afinidad la llevó a acercarse a la educación socialista implementada en esa época. Como resultado, se integró a la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR) que luchaba contra el imperialismo y el fascismo, apoyaba las luchas de los trabajadores y promovía la unión de intelectuales progresistas. Entre sus miembros se encontraban figuras como Juan de la Cabada, Luis Cardoza y Aragón, Ermilo Abreu Gómez, Efraín Huerta y José Revueltas, entre otros. Como Aurora luchó por la igualdad social en nuestro país, se ganó el mote de la "Magnolia iracunda". En sus murales se puede admirar la lucha obrera y campesina, por esto, formó parte de la Confederación Nacional Campesina y miembro del Partido Comunista Mexicano. 

Aurora luchó por la igualdad social en nuestro país, por lo que algunos solían llamarla la ‘Magnolia Iracunda’.

La década del treinta fue la más importante para Aurora Reyes, ya que pudo desarrollarse en el arte y en su lucha personal. Más adelante, comenzó a pintar murales en la Ciudad de México. La historiadora Margarita Aguilar recuerda uno de estos murales, creado en 1945 y de carácter transportable. Se trataba de una obra de doce metros cuadrados que abordaba el tema del uso del rebozo por la mujer mexicana. De manera inexplicable, este mural desapareció después de haber sido expuesto en una feria ganadera y de productos del campo organizada por la Confederación Nacional Campesina.

Entre sus otras obras se encuentran seis murales más: El atentado a las maestras rurales (1936), ubicado en el Centro Escolar Revolución; Trayectoria de la cultura en México; Presencia del maestro en los movimientos históricos de la patria; Espacio, objetivo futuro y Constructores de la cultura nacional (1962), estos últimos en el Auditorio 15 de Mayo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación; y finalmente, Primer Encuentro (1978), en el Salón de Cabildos de la Delegación de Coyoacán.

Aurora Reyes fue pionera del muralismo mexicano y una figura fundamental en la lucha social y cultural de su tiempo. Su obra no sólo destaca por su calidad artística sino por su profundo compromiso con las causas sociales. Con sus trazos logró inmortalizar temas importantes para la justicia social y la identidad en México. Su legado continúa vigente, ya que recuerda la importancia del arte como herramienta al preservar la memoria histórica.  


Bibliografía

Aguilar Urbán, M. “Los murales de Aurora Reyes: una revisión general” en Crónicas. El Muralismo, Producto De La Revolución Mexicana, En América, no. 13 (2010). Recuperado el 18 de diciembre del 2024 de https://shorturl.at/h3V2R.  

Comisarenco Mirkin, Dina. “Aurora Reyes’ Ataque a la Maestra Rural: The First Mural Created by a Mexican Female Artist” en Woman’s Art Journal, vol. 26, no. 2 (2005-2006). 

Cruz García, Ricardo. “Aurora Reyes, luchadora magisterial, muralista y poeta: Las protagonistas” en Relatos e historias en México (2023). Recuperado el 7 de noviembre de 2025 de https://shorturl.at/grfEP. 

Pereira, Armando, Claudia Albarrán, Juan Antonio Rosado y Angélica Tornero. “Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios” en Enciclopedia de la literatura mexicana (2018). Recuperado el 18 de diciembre del 2024 de www.elem.mx/estgrp/datos/16. 

Autor no identificado, Rostro de Aurora Reyes, ca. 1930-1945. Colección, Héctor y Ernesto Godoy.

Sara Mariana Benítez Sierra es licenciada en Historia por la Universidad Iberoamericana y maestra en Artes Visuales por la UNAM. Realizó una estancia académica en la Universidad de Leiden en Países Bajos. Ha trabajado en investigación y colaborado con instituciones de cultura como El Colegio Nacional y el Museo de Arte Popular. Fundó el proyecto de divulgación de la Historia, Historia Chiquita, que produce podcasts y materiales digitales. X @samaranto | Instagram @samarantoo