por Andrea Beatriz Balderas Romano
Una mañana generalmente comienza con una buena taza de café, pero cuando la vida es agitada, suele ordenarse para llevar. Aunque esta acción facilita nuestra vida, ¿qué pasa con los desperdicios generados por ese vaso desechable? Esta situación cotidiana llevó a crear un proyecto en Alemania que ofrece una opción para no utilizar envases de un solo uso.
¿Qué es RECUP/REBOWL?
En sus palabras, es el sistema reutilizable más grande de Alemania. Se trata de un proyecto que busca acrecentar una red de socios —restaurantes, cafeterías, panaderías— dispuestos a eliminar los desechos de un solo uso.
Este proyecto nació hace siete años en una pequeña ciudad germana, como respuesta a los botes de basura desbordados y a torres de vasos desechables. Ese punto de partida permitió lo que sus creadores consideran "una revolución del embalaje", una chispa que desaparecerá “cuando lo desechable sea superfluo” y la acción medioambiental con conciencia se convierta en un “requisito indispensable”.
¿Por qué se describe a RECUP/REBOWL como una revolución?
Porque sus envases pueden sustituir a los 13 mil millones de desechables que se tiran cada año en el sector alimentario de su país de origen. Cada RECUP es capaz de reemplazar hasta mil vasos desechables; cada REBOWL sustituye hasta 500 envases de comida.
Como consumidor, ser parte de este proyecto implica acudir a uno de los más de 20 mil negocios asociados a esta red, pagar un depósito de hasta cinco euros y devolver el envase y recibir el depósito de vuelta. Los asociados ganan al evitar un gasto fijo en desechables y, al mismo tiempo, poner un granito de arena por el medioambiente.
¿Cómo puede reproducirse este proyecto en México?
Si bien el país ha dado pasos para evitar los residuos plásticos, el reciclaje sigue siendo una práctica poco utilizada que puede traer grandes beneficios si consideramos las 44.6 millones de toneladas de residuos urbanos que se generaron tan sólo en 2017, según el Informe del Medio Ambiente. Hacer del reciclaje una costumbre puede aliviar el impacto medioambiental de los desechos y llevar a cabo un sistema que beneficie a los negocios puede ayudar a concretar esta valiosa práctica en nuestro país.
Andrea B. Romano fue editora de Galileo en SinEmbargo y trabajó para la Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación UNAM. Es comunicóloga por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM y disfruta del cine, el anime y las buenas conversaciones.