El barroco de hace más de tres siglos buscaba, en sus formas arbitrarias y pesadas, contraponerse a la rigidez matemática que la nueva ciencia venía a establecer. La estética en los capiteles barrocos exploraba, caprichosa, con la fantasía, la imaginación e incluso la esquizofrenia de un tiempo.

Hoy, los objetos del pasado emergen como huellas que, lejos de establecer modelos, se presentan como oportunidades de diálogo y experimentación a manera de collage. Así, la colección de bolsos Arxi del diseñador ucraniano Konstantin Kofta, inspirada en los ornamentados acabados de la arquitectura barroca que fueron tallados finamente sobre piel, presenta al capitel como un objeto, símbolo del pasado, que recontextualizado y arrojado a la calle, invita a explorar el valor de la imaginación barroca y el deleite sensual de las formas en el entorno cotidiano.

Kofta, Arxi Collection, 2016. Ucrania. kofta.com.au Cortesía de Kofta.